Fuente: Dimar
Un estudio realizado por la Dirección General Marítima (DIMAR) a través del Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas del Pacífico (CCCP) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) ha identificado los riesgos a los que están expuestas las comunidades costeras del sur de Nariño debido a fenómenos marinos, como los tsunamis.
Esta investigación, realizada en 2024, evaluó diez poblaciones ubicadas en el Distrito Nacional de Manejo Integrado Cabo Manglares – Bajo Mira y Frontera, en la región del Pacífico colombiano, particularmente en los límites con Ecuador. A través de un exhaustivo análisis de vulnerabilidad, se identificaron factores científicos y sociales que determinaron los niveles de riesgo que enfrentan estas comunidades ante posibles fenómenos naturales.
El estudio también ha revelado una solución clave: las estrategias basadas en la naturaleza. Los manglares, ecosistemas fundamentales para la protección costera, se presentan como una herramienta crucial para mitigar el impacto de estos fenómenos y aumentar la resiliencia local.
Los hallazgos de esta investigación, analizados durante una reunión técnica entre el CCCP y el WWF, no solo permiten que las comunidades comprendan mejor los peligros asociados a estos fenómenos, sino que también brindan información vital para que las autoridades, en especial los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo, puedan crear estrategias de prevención y respuesta más efectivas que protejan la vida de los habitantes de estas zonas vulnerables.
El Capitán de Corbeta Iván Rodrigo Plata Martínez, Director del CCCP, destacó la relevancia de la participación activa de las comunidades en este proceso. Los conocimientos ancestrales de los habitantes locales han sido fundamentales para adaptar las soluciones científicas a la realidad de las comunidades, fortaleciendo así la efectividad de las medidas propuestas.
“Este proyecto no solo ha permitido evaluar los riesgos derivados de fenómenos tsunamigénicos, sino también promover una colaboración entre la ciencia y las comunidades locales, quienes han sido esenciales para identificar estrategias que realmente respondan a sus necesidades”, afirmó el Capitán Plata.
Por su parte, Iván Rosero, miembro del equipo de investigación y enlace comunitario de Papayal Playa, comentó: “En nuestro consejo comunitario hay 53 veredas, de las cuales 15 son marino-costeras. Nunca antes se había realizado un estudio sobre tsunamis en nuestros planes de manejo ambiental. Este proyecto ha permitido a las comunidades vulnerables comprender los peligros de vivir cerca del mar y proporciona a las autoridades la información necesaria para implementar estrategias adecuadas de atención.”
La Dirección General Marítima continuará trabajando en estrecha colaboración con las comunidades del Pacífico colombiano para garantizar una gestión sostenible del riesgo, enfocada en la protección de la vida humana en el mar y la preservación de los ecosistemas esenciales para mitigar los impactos de los fenómenos marinos en la región.